No se puede negar que la comida es una parte fundamental en las bodas. Los invitados van a reparar en ese detalle, los novios lo saben y de ahí la dedicación al escoger el menú. Pero es que no solo es el menú, es el pica pica previo, la tarta, el posible candy bar y quien sabe si algún tentempié por si se alarga la noche. La verdad es que a la comida se dedica una parte importante del presupuesto y por eso le hemos dedicado varios posts con anterioridad. Pero para hacer bajar esos deliciosos manjares habrá que regarlos con algo y ahí está el tema que hoy nos ocupa: la bebida.

Bebidas en la boda
Vamos con los imprescindibles: Agua, refrescos, cerveza y cava/champagne. Agua, la gran olvidada… puedes poner jarras de agua con frutas para darle sabor pero es muy aconsejable que incluyas agua tanto fría como natural, con y sin gas. No solo en la comida o cena sino durante todo el evento. Lo mismo con refrescos, que no sean solo para las mezclas de cubatas. También se puede servir limonada fresca y zumos naturales, incluso si es verano podéis poner horchata y algún batido (pero no es tan recomendable).

Bebidas en la boda
La cerveza es un clásico, no pongas solo de barril o de una clase, pon al menos un par de distintas para los paladares un poco más delicados. Ofrece la posibilidad también de mezclas para hacer claras. En este caso asegurate que esté bien fresca y disponible durante toda la velada. El cava o champagne será también un imprescindible, al menos en el momento del brindis y seguro que habrá más de uno.

Bebidas en la boda
Para la comida ni hace falta advertir que no puede faltar un buen vino: Viña Sol, Sangre de Toro, Más La Plana, Viña Esmeralda, Celeste, Altos Ibéricos, Gran Coronas, Torres o cualquier otro de tu preferencia.

Bebidas en la boda
Entrando ya en materia de bebidas espirituosas, puedes optar por clásicos combinados como un Martini Dry, un Cosmopolitan o un Long Island Iced Tea. El Martini con ginebra, mezclado pero no agitado y con su aceitunilla. El Cosmopolitan, por su parte, al contener vodka, Cointreau, limón, zumo de arándanos y hielo picado, se convierte en un trago glamuroso en cualquier celebración, así que si tu boda está dentro de este estilo, este trago no debería faltar. Por último, el Long Island Iced Tea, a pesar de ser un cóctel fuerte elaborado de vodka, tequila, ron blanco, triple seco y ginebra combinado con el dulce de la cola, almíbar y zumo de limón, es cóctel clásico y de calidad.

Bebidas en la boda
Si de cócteles europeos se trata, hay otros que podrían funcionar a la perfección dentro de la carta de tu boda, tales como el Bellini, el Kir y el Gin Tonic. El primero, originario de Italia, resulta una excelente propuesta para tus invitados, al ser un cóctel delicado, suave y rico elaborado con vino blanco, champaña y licuado de durazno. El Kir, hecho con licor de grosella negra, junto con vino blanco, generalmente se sirve como aperitivo acompañado de la entrada de comida. En último orden, el Gin Tonic, elaborado con Old Fashioned, agua tónica y ginebra, suele funcionar a la perfección en bodas de tipo primaverales y coloridas, por su frescura y sencillez.

Bebidas en la boda
¿Y por qué no un buen vermut con su aceituna y la rodaja de naranja? Qué no os engañen, ¡está bueno a cualquier hora!